lunes, 18 de abril de 2011

…Si no le gustan, no quiero tener otros… (PARTE 2)

El resto del partido nos lo conocemos mejor y es más vistoso. El balón de un lado a otro en la reanudación con la falta no pitada pero en una contra de Pedrito a Pepe en el suelo, otra de Adriano a Cristiano también a la contra. Idas y venidas de unos y otros y la falta botada por Cristiano, rozando el palo de Valdés. Pérdidas y recuperaciones hasta El Momento: la expulsión merecida y el penalti más que justo de Albiol a Villa. En una internada con 3 defensas blancos que parecía que sin problemas sacarían el balón. Pues un penalti, un jugador menos y un gol en contra…y los ojos como platos, como cuando los magos sacan palomas de chisteras.
¡No, no, otra vez no, eh! Pero esta vez no sucedió. El equipo, el técnico, el estadio y el madridismo en general no bajamos los brazos y seguimos en la lucha y, como es costumbre, el equipo juega mejor con 10 que con 11. Misterios de la naturaleza. Pues nada, que en los partidos venideros nos expulsen a más, que, total, es la tónica habitual contra el Barça.
El punto de inflexión trajo otro cambio u otros, literales: Özil por Benzemá para intentar recomponer el 4-4-1 con Pepe ocupando su posición natural en la zaga. Ocasiones de Xavi, Di María a pase largo de Pepe y la clara ocasión de Carvalho por la izquierda que despeja Piqué haciendo un salto que ni Spiderman. De ahí corner, remate de cabeza y también de Pepe, pero ya fuera del campo. Que el hombre quería estar en misa y repicando y dar su aportación también ofensiva. Y más cambios, y decisivos: Manolito Adebayor por Xabi Alonso, lo que le dio mayor ataque al equipo y Arbeloa por Di María, lo que le dio mayor empaque defensivo.
Los cambios dieron mayor vigor ofensivo a los blancos y le dieron algo de tranquilidad con el resultado adverso. Se combinaban las ocasiones de unos y otros: Cristiano por su izquierda y Villa por la suya. Acabadas en nada. Como la de Kedhira y Özil por el centro o de Messi en combinación con Villa. Nada de nada. Rien de rien. Marcelo de nuevo, Özil por la derecha, Villa (esto ya lo he vivido), Manolito, ganándose el sueldo y puede que el contrato, luchando el balón en la banda hasta provocar la amarilla de Alves. Maxwell por Adriano y el 1-1.
Penalti de brasileño a brasileño, de lateral derecho a lateral izquierdo. Ellos son asín. Alves no toca el balón aunque lo pueda parecer y lo que sí parece y hace es tocar la pierna derecha de su compatriota y amigo, levantando la suya propia una vez ya en el suelo. Y Cristiano dijo AMÉN al marcarle, por primera vez al Barça. Pichichi igualado. Venga, más emoción.
Ocasiones que acaban en nada de unos y otros. Casillas saca mano, Kedhira combina con Cristiano y acaba en…cri-cri-cri…el Barça lo intenta pero sin mayor peligro y la ocasión clara de la segunda parte: Özil, ese etéreo ser, combina con Manolito por la derecha, centra a Kedhira en el área y éste, como quién lanza cual abuelilla de 90 años desperdicia la ocasión de la victoria. Que si Cristiano, que si Villa, que si…que si… que vaya impotencia blaugrana de no hacer chorreo ni sangría blanca y de, casi, comerse una derrota. No por falta de ocasiones, vamos.
Y Messi, el inmaculado, chutando al público, de impotencia. Es humano pero es un gesto muy feo. Ni amarilla, ni disculpas. Sólo protección, por parte de Muñiz que incluso se puso por delante por si aca…Eso lo llega a hacer Cristiano y al día siguiente tiene una cabeza de caballo en su cama como en cierta peliculita…Es lo que tiene idealizar y querer convertir a una persona normal en un Dios, que se le perdona todo. Y también se equivocará, digo yo…
Fin de la contienda. Sensación de haberle plantado cara al rival. Confianza en poder seguir incomodándolos y dejándolos inoperativos en Copa y, ¿por qué no? en Champions. Cuatro partidos, son mejor que uno. Autoestima mejorada. El Barça no es invencible y aunque salió, a buen seguro, con la Liga bajo el brazo, se fue con un único gol de penalti, sin chorreo, con un empate y de milagro. Y, preveo, sin una Copa. Puede que brindaran con cava de regreso a El Prat pero con vasos de tubo y no con Copas…jeje. Éste es el camino el miércoles. Ésta es la forma. ¡Y qué digan misa, oiga! :P

1 comentario:

Silvia R. Taberné dijo...

¿Casi comernos una derrota? ¿Vimos el mismo partido? Por cierto, no leo nada de los escupitajos de Pepe a los jugadores azulgrana...